Saturday, April 19, 2014

Hay dolores que se expresan callando: Eduardo Galeano

Adiós, papá grande

Homenaje simbólico a Gabriel García Márquez en su patria, simultáneo al que ocurrirá en el Palacio de Bellas Artes
Desaparece un gigante de la escritura que dio proyección mundial al imaginario de un continente, define el presidente de Francia, François Hollande
Foto
Gabriel García Márquez y el ahora presidente de Cuba, Raúl Castro, charlan durante un desfile militar celebrado el 6 de diciembre de 2006 en La HabanaFoto Ap
Foto
En Aracataca, Colombia, donde Gabriel García Márquez nació el 6 de marzo de 1927, un hombre lee la noticia de la muerte del autor de El otoño del patriarca, publicada en el diario El TiempoFoto Ap,
Foto
Una mujer camina junto a un mural dedicado al Nobel de Literatura 1982Foto Ap
Periódico La Jornada
Sábado 19 de abril de 2014, p. 2
Arataca, el pueblo caribeño que vio nacer en Colombia a Gabriel García Márquez el 6 de marzo de 1927, pidió que las cenizas del Premio Nobel de Literatura sean llevadas ahí. El lugar que muchos consideran el verdadero Macondo que Gabo inmortalizó en Cien años de soledad,realizará un homenaje simbólico de manera simultánea al que se le ofrecerá en el Palacio de Bellas Artes, en la ciudad de México.
Entre sollozos, una mujer en Barranquilla balbuceaba ante la prensa: “Gabito es de Colombia, eso no hay que dudarlo. Tienen que traerlo para acá. Debería regresar a Colombia. Con seguridad él viene”.
Mientras, la casa donde nació el escritor y periodista, ahora convertida en museo, pronto estuvo asediada por los dolientes. ‘‘Esto parecía un velorio”, dijo José Antonio Vargas, titular de la Secretaría de Cultura en ­Aracataca.
‘‘Estamos invitando a la población a un sepelio simbólico para el próximo lunes, para que asistan todos los habitantes de esta localidad y todos los de los pueblos vecinos que deseen participar”, anunció el alcalde, Tafith Hatum, quien hará una petición formal al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, para que gestione que las cenizas sean trasladadas a ese pueblo.
Conmoción en el mundo
El escritor uruguayo Eduardo Galeano, expresó tristeza por la muerte de su amigo Gabriel García Márquez y llamó a recordarlo a través de su obra. ‘‘Hay dolores que se dicen callando. Se dicen callando, pero duelen igual. Cómo nos duele la muerte del Gabo García Márquez”, dijo en una entrevista telefónica desde Río de Janeiro a un canal de televisión.
‘‘Lo que más me duele está en las bellas palabras que la muerte nos ganó de mano y nos robó. Yo creo que ellas, las palabras robadas, se escapan a la menor distracción, huyen de las páginas de los libros de Gabo y se nos sientan al lado de algún café de Cartagena o Buenos Aires o Montevideo. O aquí, en Río de Janeiro”, declaró acongojado por la noticia y prefirió no explayarse acerca de la profunda relación que los unía.
García Márquez residió en Cuba por varios años, en los cuales entabló una cercana amistad con Fidel Castro, quien todavía no ha reaccionado de manera pública por el fallecimiento del escritor y periodista.
La muerte del autor de Cien años de soledad, El amor en los tiempos del cólera y El general en su laberinto, en la ciudad de México a los 87 años de edad, conmocionó al mundo de las letras y ha generado una ola de pesar y condolencias.
El presidente de Francia, François Hollande, recordó el viernes la figura del escritor colombiano, tanto por su obra literaria ‘‘universal”, como por su combate ‘‘contra el imperialismo” en su labor periodística.
‘‘Con García Márquez desaparece un gigante de la escritura que dio una proyección mundial a las representaciones imaginarias de todo un continente”, afirmó Hollande en un comunicado difundido por el Palacio del Elíseo, en París.
Vladimir Putin, presidente de Rusia, hizo pública una carta dirigida a Mercedes Barcha, en la que expresa sus condolencias por el fallecimiento de su esposo. ‘‘Perdió la vida un gran escritor y pensador, quien en todo tiempo guardaba su lealtad a los ideales luminosos del humanismo y la justicia Sus obras literarias inspiraban a generaciones enteras no sólo en América Latina, sino también en todo el mundo. Estamos orgullosos de que este hombre admirable fue un amigo cercano de nuestro país.”
Chile se unió al luto de la literatura universal, después de que Gabriel García Márquez se convirtió en un habitante más del Macondo que él mismo creó. La ministra de Cultura de ese país, Claudia Barattini, lamentó la muerte del premio Nobel, uno de los más grandes colombianos de la historia.
(Con información de Dpa, Afp y Enrique Gutiérrez, corresponsal en Chile)

Friday, April 18, 2014

Tres cantares Tseltales


Búffalo Conde
Flor de oro
Fuente de huertos de mi amado,
noria de aguas sagradas para mi honor,
que corren del campo donde descansa el búfalo:
venga mi amado legendario.
“Ya vine a mi campo, oh amada, compañera mía,
mi agua y mi jugo he bebido, esposa mía:
toma abundante jugo, amada mía”.
Es la voz de mi esposo que llama.
Tiempo de bailar los árboles
Ponme como sello sobre tu corazón,
como una marca sobre tu brazo.
Las muchas aguas no podrán apagar el amor,
ni lo ahogarán los ríos ni los pozos,
sobre las montañas de los aromas de mi ropa.
Desde que fui en sus ojos como la que lleva alegría,
yo soy muro y mis pechos bonitas puertas
para los sustos de la noche de mi alma.
Tus cabellos como parvadas de palomas negras.
Regala la mentira
¿Qué es tu dueño más que otro dueño,
oh la más bella de todas las vírgenes de mi pueblo?
Mi dueño es moreno, condenado a escribir versos,
su cabello como azabache color de cuervo.
Sus cabellos muy suaves, negros como cuervo,
sus ojos como búfalo junto a los ríos de las aguas,
sus labios como azucena que destila miel aromática,
su cuerpo, como torre de oro.
 Xnich k’ana tak’in
Ya’wil ya’wal sts’unu te kajwal
ch’ul uch’oja’il yu’un jlekilal,
te ba’-ay xmaal ta te’tikil te baj ya xkux yo’tan te’tikil wakax
laj’me ta tjojol namej k’inal kajwal.
Talon ta jk’inal, joy, jmajt’anat
te jtolja’ sok te ya’lel sit te’ajk’ jkuch’ojix, joy, jmajt’anat,
uch’aj bayel ya’yel sit te’ajk’ joy, jmat’anat
ja’ sk’op jmamalal te ya x-ik’awan.
Te te’ak’etik yorail ya x-ajk’otajik
Ak’aj-on jich bit’il markaj-il ta wo’tan,
jich bit’il senyajil ta k’ap
bayel t’olja’etik ma xtup’ yu’un te sbujts’ o’tanil,
kapaluk ma xtuo’ uch’oja’il ja’nix jich ma sjik’an te uk’um
ta sba lum k’inal sbujts te jk’u’ jpak’.
Te k’alal a jkilbe te sit pajal sok te t’olja’ ja’me ya’k olal k’inal
jo’on pajk’on, te jchu’ pajal sok t’ujbil ti’nail,
la xiwitesben jch’ulel ta ajk’ubal
te stsotsil a jol pajal sok ipal ijk’al te’tik stsumut.
Ak’a ta majkt’anal te lotil
¿Binti te awa’jwal ay yan awa’jwal
a... lom t’ujbilat ta spisil te Jalame’tik ta jlumal?
te kajwal tsajsajtik nax, ak’bil ta stojol sts’ibu’el Xermon
stsotsil ijk’nax jich bit’il sbonil joj.
Lom k’un nax te stsotsil sjol, ijk’ jich bit’il jo
te sit pajal sok te’tikil wakax, te stolja’lel uk’um te ay sok,
te ya’benal sti’, pajal sok asasena,
te xchi’il sts’ujujet ya’lel ya xysl’ tol koel
pajal sok k’anal tak’in toyol.
Búffalo Conde (Pedro Pérez Conde), pionero de la escritura poética en lengua tseltal, es originario de Tenejapa, Chiapas. Su colección La boca de la verdad/Ya’ ye’ete bats’il smelelil, publicada en 1996, reúne sus aproximaciones y paráfrasis de numerosos fragmentos de poesía bíblica y española del Siglo de Oro. ¿Y por qué no?, también en tseltal la literatura puede nacer reinterpretando El Cantar de los Cantares.

Tiempo de Blues


Singin' in the Rain: una tarde en la Cineteca Nacional
Raúl de la Rosa
Primera llamada
N
ada más faltaba que Gene Kelly, Donald O’Connor y Debbie Reynolds ingresaran por la calle de Mayorazgo con sus impermeables amarillos y sus paraguas cantando bajo la lluvia, era factible, ¿por qué no? Estábamos en la centelleante Cineteca Nacional y no exagero; los relámpagos de abril estaban en todo su sonoro esplendor, que precedieron a un torrencial aguacero y como buena película de acción se abatió una granizada de Tláloc jugando a las canicas.
Es inevitable, las fechas son las mismas (un día de diferencia). Me traslado al 16 de abril de 1964 cuando otro inusual aguacero se abatió sobre México-Tenochtitlán, cuando Tláloc ingresa a las crónicas culturales, sociales y arqueológicas de nuestra ciudad acostado sobre 112 ruedas para ser depositado en la nueva sede del Museo Nacional de Antropología.
Lo de inusual hoy en día no tiene valía, pues lluvias, trombas, aguaceros, chubascos o granizadas caen cuando se les pega la gana, y esta sucedió en el 57 aniversario de la muerte de Pedro Infante, razón por la que navegamos a la Cineteca para asistir a la exhibición del documental de Luigi Lupone, que nos narra a lo largo de tres décadas elFervor infantilista (título del documental) que acontece cada 15 de abril en el panteón Jardín, donde el fervor popular y el infantil surrealismo mexicano no tienen paralelo; hoy viernes 18 se estrena en la Muestra Internacional de Cine de la Cineteca Nacional.
Segunda llamada
Sí, las comparaciones, a veces, son inevitables. ¿Cómo no hacerlas? El 16 de abril coinciden: el arribo del mencionado Tláloc el nacimiento de uno de los más notables arquitectos de México: Pedro Ramírez Vázquez (1919-2013), cuyo genial ciclo concluye 94 años después el mismo día, y mencionar que sus obras arquitectónicas, como el Museo Nacional de Antropología o el Estadio Azteca, ¡no tienen goteras! Ahí están enhiestos como el día que se inauguraron.
Foto
En estás condiciones lució uno de los pasillos de la recién remodelada Cineteca Nacional, durante el aguacero del pasado 15 de abrilFoto Lé Miller
Los ingenieros de la firma Colinas de Buen calcularon el paraguas del Museo Nacional de Antropología, las estructuras del Estadio Azteca, de la Torre de Pemex y varias construcciones más de las que no hay que agregar nada, ahí están. Sí, la memoria me hizo viajar y al regresar me pregunté: ¿Dónde Señor están los arquitectos, ingenieros y constructores de antaño? Y si me lo piden, me voy hasta el Virreinato y al mundo prehispánico.
Es una historia de horror y cinismo a la que –tal parece– ya nos acostumbramos, vivimos una carrera en que nadie ganará, empezó mañana y ayer terminará. Los comentarios de todos los asistentes cargados de ironía, que la Línea Dorada del Metro, que la nueva Cineteca Nacional, que en plena función se filtra la lluvia, los baños se inundan y las instalaciones eléctricas se ¡convierten en regaderas!
Tercera llamada
Ahora todo se lo achacan a la Luna roja, pero a las 18:35 horas llovía en la cabina del cácaro, no podía creer lo que veía, la Sala 7 se inundó. Cuando me metí quedé asombrada, era como si no tuviera techo. Llegaron los de intendencia y los vigilantes, nos sacaron y no nos dejaron tomar fotos; también se inundó la parte de la biblioteca, nos comentó Parika Benítez, quien agregó: No hay baños suficientes, las taquillas tienen un pésimo servicio. En esta Muestra no se emitieron abonos, si quieres descuento te envían de una ventanilla a otra. ¡Bravo por haber remodelado y robado tanto!, las pantallas que cuestan 1 millón de pesos las cobraron en 10.
Mejor me quedo con el mito de Pedrito Infante y su angustiado grito que recorre las escenas de aquel 24 de marzo de 1982, cuando se quema parte importante del acervo fílmico de nuestro país, cargando en sus brazos al hijo quemado: ¡Toritoo!
Total, no está muerto, tan sólo no está vivo.

Sunday, April 06, 2014

La recuperación comunitaria de Xayakalan

 

en la costa michoacana es también
la de sus tierras, guardias y autonomía
En su territorio se cruzan intereses de todo tipo: los gobiernos buscan implementar proyectos carreteros que faciliten el trasiego de mercancías y estimulen el turismo de playa; las mineras quieren explotar la veta que nace desde San Miguel Aquila; los pequeños propietarios quieren sembrar sus tierras o fraccionarlas y venderlas, y los narcotraficantes tienen aquí un importante punto de circulación de sus mercancía
Adazahira Chávez


La organización de la comunidad nahua de Santa María Ostula, Michoacán, en su lucha por la tierra, reanudó la marcha en febrero de este año. Después de que en junio de 2009 los comuneros activaron su Policía Comunitaria y retomaron el lugar conocido como La Canaguancera (renombrado Xayakalan), enfrentaron una ola de asesinatos y desapariciones —sobre todo contra miembros de la guardia tradicional o de los bienes comunales— que estableció un clima de terror y obligó al desplazamiento de familias enteras.
Pero ya están de regreso y afirman, como lo declararon en 2009, que no abandonarán sus tierras. En fechas recientes, acompañados por grupos de autodefensa de Tierra Caliente, los guardias comunitarios reingresaron a su territorio —muchos de ellos, como su comandante Semeí Verdía, estuvieron exiliados— y los comuneros desplazados también volvieron a Xayakalan, que sigue en disputa legal con los pequeños propietarios de La Placita, quienes lo invadieron hace ya cuatro décadas. La tarea urgente, señalan, es levantar de nueva cuenta las asambleas y trabajar las tierras que les dieron sustento y que tuvieron que abandonar.
La tarea no se mira fácil, y los nahuas lo saben. Relatan que en su territorio se cruzan intereses de todo tipo: los gobiernos buscan implementar proyectos carreteros que faciliten el trasiego de mercancías y estimulen el turismo de playa; las mineras quieren explotar la veta que nace desde San Miguel Aquila; los pequeños propietarios quieren sembrar sus tierras o fraccionarlas y venderlas, y los narcotraficantes tienen aquí un importante punto de circulación de sus mercancía. En este estado —de acuerdo con las denuncias que los comuneros han hecho desde hace años— muchas veces estos actores son los mismos sujetos. Y de este territorio ambicionado son dueños los comuneros de Ostula. 

Tierra rica, tierra despojada

La cabecera comunal de Ostula y sus 22 encargaturas abarcan más de 28 mil hectáreas del municipio de Aquila, uno de los de mayor marginación en Michoacán. Los nahuas han poblado poco a poco la porción de su territorio que se extiende hacia la costa michoacana.
Las tierras correspondientes a la encargatura de Xayakalan, informan los comuneros, se localizan dentro de sus títulos primordiales del siglo xviii y dentro de la Resolución Presidencial que reconoció parte de su territorio en 1964. A pesar de ello, enfrentan un litigio agrario por unas 700 hectáreas que seis pequeños propietarios de La Placita invadieron “no sólo para la siembra de papaya, mango y tamarindo, sino para venderla al mejor postor” a pesar de las medidas cautelares a favor de los indígenas. La Comisión por la Defensa de los Bienes Comunales de Ostula señala que algunos de esos invasores son cabezas del crimen organizado en la región.

Cruce El Naranjo-Tenosique, Tabasco. Foto: Prometeo Lucero
La tierra de Aquila tiene abundancia de minerales (plata, zinc, oro y cobre), además de yacimientos de hierro, que en la actualidad explotan las empresas Ternium, Sicartsa y Metal Steel, y aporta una cuarta parte de la producción nacional. La veta que atraviesa San Miguel Aquila —comunidad de la que también tuvieron que salir los integrantes de la guardia tradicional y los comuneros por conflictos con la mina y el crimen organizado— llega hasta tierras de Ostula, y la empresa argentina Ternium tiene en la mira su explotación futura. Ternium es dueña de la mitad de Peña Colorada, mina de Ayotitlán, Jalisco, que ha provocado también persecuciones contra los líderes comuneros nahuas como Gaudencio Mancilla.
Dentro de este territorio invadido no sólo pasan las riquísimas vetas minerales, sino que hay playas con especies animales en peligro de extinción. Allí se contempló la ampliación de la carretera Coahuayana-Lázaro Cárdenas, e incluso la construcción de un puerto para transportar materiales que Ternium extrae de San Miguel Aquila.
Los días 13 y 14 de junio de 2009, el Congreso Nacional Indígena publicó el Manifiesto de Ostula, que reivindica el derecho a la autodefensa. Después de varios intentos infructuosos de negociación y al sentirse burlados por el gobierno, los comuneros retomaron las tierras de Xayakalan en 2009, establecieron su guardia comunitaria “para cuidar el territorio que nos pertenece” y se asentaron cerca de 250 personas, pertenecientes a 40 familias.
Los comuneros decidieron no participar en las elecciones oficiales en 2011, al igual que sus hermanos p’uhrépechas de Cherán, Pómaro y Coíre, en rechazo a la poca eficacia de las autoridades y el divisionismo que, denunciaron, promueven los partidos políticos.
La respuesta a su reto fue atronadora. En los últimos tres años, 32 pobladores de Ostula fueron asesinados brutalmente o desaparecidos. Destacan las ejecuciones en 2011 de los líderes Trinidad de la Cruz Crisóstomo, conocido como don Trino oel Trompas, encargado de la guardia comunitaria, y de Pedro Leyva. Las bases de la Armada —que se establecieron después de 2009— no ayudaron a detener la ola de violencia. Las autoridades judiciales no resolvieron ni uno sólo de los crímenes. Las balas de los “cuerno de chivo” poblaron las escenas de los crímenes, y las familias amenazadas huyeron.

Pocos habitantes quedaron en Xayakalan, pero los desplazados se ocuparon de planear el retorno y la reconstitución de su organización autónoma, que se pudo concretar este 2014. El 8 de febrero, “un grupo de comuneros de Santa María Ostula, coordinado con los grupos de autodefensa de los municipios de Coalcomán, Chinicuila y de la cabecera de Aquila, tomó el control de la tenencia de Ostula”, informaron en un documento público.
Coincidentemente, desde ese día “grupos de policías federales ministeriales e integrantes del ministerio público, de manera totalmente ilegal han ido a amenazar a los comuneros que viven en Xayakalan con desalojarlos”. Para los indígenas es “la continuación de las graves condiciones de guerra no declarada que vive Ostula desde que precisamente resolvió hacer el resguardo de las tierras de Xayakalan, el 29 de junio de 2009”.
Este 10 de febrero, un pelotón del Ejército federal intentó desarmar a la guardia comunitaria y a los grupos de autodefensa que la respaldaban, pero la población hizo que los soldados devolvieran las armas. El 13 de febrero, más de mil 200 comuneros en asamblea decidieron reorganizar formalmente la Policía Comunitaria. Ahora sus esfuerzos se centran en fortalecer los mecanismos comunitarios de decisión, reconstruir la base material para su organización y supervivencia —la comida y los recursos escasean— y mantener la seguridad en su territorio. A pesar de los años de terror, indican a Ojarasca desde Ostula, “la gente responde a su ancestral organización”


Primera llamada
V
er, conocer, disfrutar y escuchar tanto en tan poco tiempo es un reto que no todos pueden cumplir en el Festival Cumbre Tajín. ¿Cómo definirlo? Habrá que recorrer las etapas por las que este encuentro ha transcurrido; desde la llamada Cumbre del fin del Milenio en el 2000 a la más reciente tres lustros lo contemplan, se puede decir que, afortunadamente, no queda casi nada –salvo el nombre– de aquella edición milenaria.
Contra viento y marea y con el apoyo del gobierno de Miguel Alemán Velasco, bajo la dirección de Gastón Melo Medina, entonces vicepresidente del Grupo Televisa, se celebró la llamada Cumbre del fin del Milenio en la zona arqueológica de El Tajín, bajo protestas más que justificadas, pues se instalaron templetes y estructuras metálicas para los escenarios y graderías para 5 mil espectadores y un permiso para realizar ¡excavaciones no mayores de 20 centímetros!
La segunda edición no contó con el beneplácito de los dioses: un templete colapsó, hubo varios lesionados y algunos viejos totonacas mencionaron que las deidades del trueno y de la lluvia se habían indignado; para la siguiente cita se construyó –a un kilómetro de distancia– el Parque Takilhsukut.
Este festival ha crecido en organización y contenido: los artísticos, los culturales y los turísticos; pero el mayor atractivo para la inmensa mayoría de jóvenes que acuden son los grupos musicales, 25 en total, seleccionados en una programación ecléctica por Brenda Tubilla, productora general de la cumbre. Hubo pa-ra todos los gustos y sabores, uno de ellos, Tool, convocó a la mayor asistencia registrada hasta entonces: 40 mil fans, una etnia musical aparte, ya que al día siguiente de su presentación todos sus seguidores identificados por sus vestimentas oscuras, los tatuajes, las barbas y peinados estrafalarios habían partido.
Pero no son los conciertos los que le dan a la Cumbre Tajín su carácter excepcional, sino la amplia, la insólita y la maravillosa presencia de mil rostros de la cultura totonaca por medio de la tradición oral de los abuelos, de las mujeres y de los jovencitos, de uno y otro sexo, que cantan, bailan y cuentan sus tradiciones; de cómo obtienen los colorantes de origen mineral y vegetal para teñir los hilos con que bordan sueños y animales fantásticos en sus ancestrales indumentarias.
Talleres, teatro, cocina tradicional, danza, los Voladores –reconocidos como patrimonio cultural de la humanidad–, cine, actividades infantiles, música, ceremonias, artesanías, el recuento es amplísimo de lo que comparten con los miles de visitantes que asisten a esta insólita convocatoria anual.
Segunda llamada
Los rezos ancestrales se iniciaron el 20 de marzo –inicio del equinoccio de primavera– para pedir permiso y protección a los dioses tutelares del Totonacapan en las tres sedes: la población de Papantla, la zona arqueológica de El Tajín y el Parque Takilhsukut .
Visita nocturna a la ciudad sagrada de El Tajín, al espectáculo de luz y sonido con la proyección de cientos de efectos lumínicos sobre edificios y pirámides con un fondo musical para la narración histórica, show en el que las estructuras no se tocan y sólo entra un número limitado de visitantes custodiados por personal que los guía con pequeñas linternas, la experiencia nocturna es conmovedora.
No presagiaba el gran don que pocos disfrutamos en la visita guiada a cargo del doctor Arturo Pascual, especialista y autor de varios libros sobre El Tajín; nunca este recinto será igual. Todo el conocimiento acumulado por generaciones otorgado por este arqueólogo generoso con la palabra y su sabiduría por más de tres horas en la ciudad sagrada que preside la Pirámide de los Nichos, una de las más hermosas de Mesoamérica.
Hay preocupación por los grados de deterioro que la zona resiente, pero poco se habla de que la contaminación es una de las principales causas, de la invasión urbana en el polígono de la zona arqueológica, de cuando Petróleos Mexicanos perforaba el cerro donde despuntaba el sol, de la especulación urbana y los pocos recursos para seguir explorando; se habla que sólo un 25 por ciento es lo que conocemos de la zona arqueológica.
Tercera llamada
Conocimos –por primera vez– un proyecto pionero en México: el Laboratorio de Acrobacia Indígena, que ha rescatado una tradición ancestral y milenaria, y que aún continúa en varias comunidades del país.
Para lo anterior se ha creado un espacio en el que se muestra el talento de grupos, como los zanqueros de Oaxaca y Guaguas voladores, acróbatas y equilibristas de gran destreza. El Circo Atayde, por medio de Federico Serrano, apoya este programa en la localidad de Santa Teresa Xochiapa, por lo que es una extraordinaria oportunidad para promover este proyecto y no esperar el siguiente equinoccio de primavera para continuar con estas ancestrales prácticas circenses.
Como en cualquier feria en este país, no podía faltar la gastronomía, patrimonio inmaterial de la humanidad, que en esta región del Totonacapan toma mil formas y sabores con nombres armoniosos: molotes y bocoles, espolvoreadas de pipián, las estrujadas, así como el rey de la masa envuelta: el enorme zacahuil, todo envuelto en el dulce aroma de la vainilla.
En el trayecto del parque temático a la zona arqueológica se instalan cientos de puestos de comida y bebidas en espera que para las próximas ediciones se conviertan en un ordenado y variado tianguis. Asimismo, sigue vigente otra promesa repetida y no cumplida: mejorar la carretera de Poza Rica a Papantla. Hay que recordar que el parque temático sigue en funciones todo el año con sus talleres.
Desde sus inicios, la Cumbre Tajín ha tenido críticas, algunas de ellas justificadas, pero en 2014 vimos cómo ha crecido y cómo se han corregido fallas anteriores. Disfrutamos los conciertos, a los que asistieron más de medio millón de jóvenes en las tres sedes de la cumbre en una plena y gozosa vivencia, donde la música, pero sobre todo la cultura totonaca, fueron los principales protagonistas, por lo que estos ejemplos deben ser replicados en otras entidades del país. En este proyecto ha sido fundamental la visión y labor Salomón Bazbaz, director de la Cumbre Tajín.