"Fui a entrevistar a Rivera (a Santiago de Chile) para el periódico La Prensa de Buenos Aires, y por angas o por mangas, terminé en México… Un retroceso si Los chuchos se quedan con el PRD… Los patronatos culturales deben estar bien vigilados", comenta a la singular polemista en la víspera de su cumpleaños 84
Héctor Cortés Martínez
hecomartin@yahoo.com.mx
Puntual, tácita, directa, polémica. La periodista, museógrafa, escritora, promotora y crítica del arte y la cultura, Raquel Rabinovich de Rosen, "Raquel Tibol", a sus 84 años, es una mujer respetada por sus amplios conocimientos del quehacer artístico y cultural pero, sobre todo, porque ha sido testigo de las más importantes etapas históricas, sociales y políticas de un México en el que, bajo su óptica, "estamos viviendo un momento sumamente grave".
En entrevista exclusiva con , realizada en el estudio de su casa, donde todos los muebles, entre ellos libreros, archiveros, mesas, cuadros y sillones, se encuentran perfectamente ordenados, tal como una serie de piezas dignas para una exposición artística, acusa al gobierno de Felipe Calderón de manejarse con frivolidad política, porque habla y dice cosas sin la responsabilidad de un jefe de Estado.
En la antesala del fascismo
"Eso de ponerse la gorra con cinco estrellas, no le corresponde. Es una ilegalidad, porque siendo el jefe nato del Ejército, como presidente es una cosa, pero él no es general de división", añade Raquel Tibol, quien llegara a México en 1953, después de haber salido de su pueblo natal, Basilvaso en Argentina."
¿Calderón dice muchas cosas y no es responsable, cómo cuáles?
—No las cumple. Por ejemplo, que va a haber empleo, no hay empleo. Que va a haber seguro popular bien servido, cuando inclusive ni en el IMSS ni en el ISSSTE se cumple lo mínimo. Entonces prometer y prometer, bueno, prometer es fácil, cumplir es difícil.
También prometió manejo democrático de la clase obrera y basta ver el poder que le ha dado a la Elba Esther Gordillo, en lo que respecta sólo al Sindicato (Nacional) de Trabajadores de la Educación, sino a todo el poder que le ha dado para que sea una fuerza oscura que le ayuda a sus propios fines, eso es sumamente grave, por un lado. Por el otro, el haber dejado a ese pillo de (Carlos) Romero Deschamps en el sindicato de petroleros, pese a la cantidad de irregularidades, de latrocinio que hay dentro del sindicato, además, es muy preocupante la cantidad de contratos que se están haciendo tanto en Pemex como en la Comisión Federal de Electricidad por fuera. Se dice que siguen siendo instituciones o fuerzas nacionales, base de la nacionalidad económica y laboral de México, bueno pero en lo concreto, la cantidad de contratos, equivalen a una enajenación.
Maestra, ¿pero además de esta situación política...?
—Pero además, todas las agresiones que ha sufrido el campesinado durante el gobierno de Fox y, ahora, también durante el gobierno de Calderón, en el sentido de que los campesinos están abandonados a la buena de Dios.
¿Pero igual, no hay proyecto agrícola?
—Por eso, no hay un proyecto serio, por eso hablo de promesas frívolas y de una entrega a Estados Unidos y un manejo que si de pronto se expropian los 250 millones de dólares con el chino (Zhenli Ye Gon, empresario nacionalizado mexicano) y se hacen colectas de toneladas y toneladas de ayuda. Uno ve un noticiero y otro, y esas ayudas están llegando de una manera parcial. Hay localidades de Tabasco que están totalmente desprotegidas, y otro tanto ocurre en Chiapas. Bueno, todo el problema de Oaxaca, no sólo no lo ha solucionado, sino que lo ha agravado al darle toda la fuerza al Ejército.
Esos son los prolegómenos de un fascismo, peor situación no puedes estar viviendo México, porque cuando se le suelta la rienda al Ejército es el primer antecedente, el prólogo para un fascismo. Haber qué va a pasar -afirma con voz firme, mirando directamente a este reportero.
Pero dígame, ¿cuál fue el México que encontró al llegar en 1953?
—El México de aquel momento era un México agobiado por el macartismo. En el México de aquellos años se habían refugiado los que estaban perseguidos en Estado Unidos, inclusive, en los días primeros que viví aquí, fue el caso del secuestro del que era pariente y allegado de los Rosemberg, que murieron en la silla eléctrica. El matrimonio acusado de espías de la Unión Soviética. Pues llegó aquí la CIA o quien sabe cuál de los organismos. Él estaba refugiado en Michoacán, lo secuestraron y llevaron a Estado Unidos, sin pedir permiso al gobierno mexicano, o se hizo de la vista gorda.
Recapitula sobre su llegada a México y recuerda que fue a Santiago de Chile a entrevistar a Diego Rivera (Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez, 1886-1957) "y por angas o por mangas terminé en México".
"Me había invitado a venir con él, para que hiciéramos en México el Congreso de la Cultura. Pues él había asistido en Santiago de Chile al Congreso Continental de la Cultura, presidido por Pablo Neruda (Neftalí Ricardo Eliecer Reyes Basoalto, 1904-1973) y las conclusiones del congreso eran que cada país organizara el suyo. Pero debido a esa situación del macartismo fue imposible.
¿A más de 50 años, cómo ve a México?
—Bueno, estamos viviendo en México un momento sumamente grave, por el gobierno calderonista.
La izquierda en su laberinto
Molesta, increpa a este reportero y reclama: "Me vino a entrevistar (como) a una critica, historiadora de arte y me está haciendo preguntas como si yo fuera una politóloga. Tengo intereses políticos. Se lo que hablo en el terreno político.
Me interesa su punto de vista sobre lo que sucede en México. ¿Qué pasó con las organizaciones políticas como el Partido de la Revolución Democrática, que luchaban por ganar espacios y que fueran atendidas las demandas sociales?
Al esgrimir una sonrisa, deja atrás su enojo y asegura: "La izquierda en México está pasando un momento sumamente crítico y difícil, "Todo el chuchismo -en referencia a Jesús Ortega Martínez, líder de la corriente política Nueva Izquierda y precandidato a la presidencia del PRD- es una fuerza que está queriendo copar espacios para, digamos, el colaboracionismo y si se queda en manos de Los chuchos va a ser un gran retroceso para el país.
¿Se perdió la ilusión después del 2006?
—No, no creo que se hay perdido la ilusión, lo que pasa es que surgen fuerzas oportunistas. El que ganó con el fraude, que fue Calderón y la izquierda se divide, entonces hay colaboracionismo en muchos estratos políticos de la izquierda.
Con más de 40 libros editados, entre ellos, Julio Antonio Mella en El Machete. Antología parcial de un luchador y su momento histórico (Ediciones de Cultura Popular, 1968); Palabra de Siqueiros (Fondo de Cultura Económica, 1996) y Escrituras de Frida Kahlo, colaboradora y articulista en diversos medios impresos, en radio y televisión, jurado de múltiples concursos, realizadora de varias museografías y exposiciones, Raquel Tibol señala que los productores y creadores artísticos se han acostumbrado a los apoyos del gobierno.
"Lo que pasa es que el Estado no debe dar tantos estímulos. Los que hacen arte conceptual buscan becas para poder hacer arte conceptual, que no siempre es interesante. Los que hacen un arte más tradicional en gráfica, pintura, escultura, no buscan tener su propio mercado y entonces están esperando mamar de la teta oficial", asegura.
¿Así pasa en otros ámbitos como el teatro, por ejemplo?
—Es una verdad que no se puede negar, además surgen y quién sabe cómo se puede, a estas alturas, tantos pequeños grupos de danza, de teatro, de nuevos cineastas que buscan hacer su primera película. Yo pienso que debe haber filtros de calidad bastante severos y si bien le corresponde por ley al Estado auspiciar la cultura, también no se trata de auspiciar todo. Debe haber un filtro selectivo, absolutamente.
¿Sería positivo que en las producciones artísticas tuviera un papel más importante la iniciativa privada?
—La iniciativa privada ya lo tiene, a través de patronatos. Un ejemplo bastante curioso es el del Museo de Arte Popular, el que está en la antigua estación de bomberos. Bueno, da la impresión que el perfil actual del museo está dado por la señora Arango a través del patronato. Prefiero, en el caso de lo privado, que haya el Museo Sumaya, por ejemplo, que no le está pidiendo un centavo al Estado, claro el dueño es el hombre más rico de México, (Carlos) Slim, pero a la vez tiene muchas entidades culturales.
¿Pero se está promoviendo arte?
—Bueno, a mí no me enamora que haya que aceptar. También parece que se van a restituir las colecciones de Televisa, que está muy acostumbrada a mendigarle al Estado, esperemos que lo haga con su propio dinero, como lo hizo cuando tenía el Centro Cultural Arte Contemporáneo, el que se cerró. Pero hay muchas, el Museo Nacional de Arte, el Museo Tamayo, el Museo de Arte Moderno, necesitan su patronato. Una cosa son los patronatos generosos y, otra cosa, es el uso poco claro de los museos oficiales por los patronatos. Los patronatos deben ser generosos y si hay exención de impuestos, que esté muy vigilado por la autoridad.
Sin ningún recato, critica la obra Puerta 1808, del artista Manuel Felguérez, "en la cultura, el Gobierno del DF está un poco descaminado. Está pésimamente colocada como para que se estrellen los coches contra ella, porque es una estructura negra contra un edificio negro, de modo que es peligrosísima, que la saquen ya, que la manden a cualquier otro lado, yo diría que al bote de la basura".
Echeverría y los tableros de Diego
Igualmente dijo de la exposición Diego Rivera muralista, en el Palacio de las Bellas Artes, que aunque es valiosa por exhibir piezas nunca vistas por el público, "su museografía y presentación deja mucho que desear ya que en las salas le han metido a los vidrios unas grandes reproducciones con retratos, autorretratos de Rivera. Da la impresión que fueran salas clausuradas porque dejaron las puertas cerradas y con estas reproducciones da la impresión de que ahí no hay algo".
Sobre esta colección de piezas del muralista, reveló: "Se exhiben unas piezas sumamente valiosas que nunca habían salido al público, que las compró (Luis) Echeverría cuando fue presidente".
Y profundiza en el origen de estas obras, quien tuviera una amistad cercana con artistas e intelectuales de esa época, lo mismo con Frida Kahlo, Diego Rivera, David Alfaro Sequeiros, Rufino Tamayo, Consuelo y Rosaura Revueltas, entre otros.
"Cuando Rockefeller (John D. Rockefeller 1839-1937) le borra a Diego el mural en el Rockefeller Center y le paga 21 mil dólares que habían acordado, de esos 21 mil dólares, él le paga a la intermediaria y quedan ahí sobrando como 15 mil dólares, más o menos, no toma ni un centavo de ese dinero y como estaba ya en su etapa trotskista, aplica el dinero para pintar 21 tableros para la escuela de cuadros de los trotskistas."
De estos 21 tableros que, asegura, tuvieron una vida azarosa, porque fueron a parar a una bodega en el sótano de un asilo que se quemó, salvándose "uno que se vendió a Suecia, otro que adquirió el INBA y seis que compró Echeverría".
Las pinturas, añade, son de carácter antimperialista, antifascista y antinazi, "las tres cosas, que pintó Rivera en 1933, frente a los acontecimientos bushianos siguen absolutamente vigentes, porque Bush está implantando una política global muy cercana al fascismo, una política bélica, expansiva, dominante, de un furor imperialista como pocas veces se ha visto".
¿Maestra, la cultura no puede competir con otros medios, en especial, los electrónicos, por su penetración, pero qué hacer con el grado de enajenación de la sociedad?
—No veo los canales de Televisa y Tv Azteca, veo el Once y el 22, ambos, dentro de los parámetros gubernamentales para la cultura. Creo que a la gente se le ha ido pervirtiendo de tal manera en sus gustos. Hay una incitación muy burda para las cuestiones sexuales, no es que yo sea puritana, pero a los niños hay que dejar que desarrollen su sexualidad.
Tendría la sociedad que estar más sana y si la sociedad en su conjunto, con el gobierno a la cabeza, es una sociedad en muchos aspectos enferma, bueno, corresponde a las universidades, a las instituciones educativas rescatar esto, pero cómo se puede pensar en rescatar cuando el sindicato de maestros está en manos de una mujer (Elba Esther Gordillo Morales) con tanto arrastre, prácticamente criminal, desde el punto de vista social.
Luego que el pasado 31 de octubre, Raquel Tibol recibiera el grado de doctora honoris causa por la Universidad Autónoma Metropolitana, por su trayectoria como periodista, investigadora y divulgadora del arte mexicano en el mundo por más de 50 años, habla de la cultura:
"Lo de Fox, fue lo de Fox, brutal fracaso: allí está el fantasma de la llamada Biblioteca Vasconcelos sin solucionar; el de Conaculta, disminuida su autoridad; no se sabe qué va a pasar con esta comisión para celebrar el bicentenario y el centenario. Como dije el día que me otorgaron el doctorado honoris causa la Revolución no fue una, hubo dentro varias revoluciones, una, la que encabezaba el campesinado, otra, la de la clase obrera y otra, la de los hacendados, sus grandes comerciantes y el sector burgués".
Su carrera periodística en 1952 ya la realizaba en Chile, pero en México su primer trabajo fue el estudio monográfico dedicado al Taller de Gráfica Popular, que se publicó en 1957.
"Trabajé inicialmente en México en la Cultura, después, hasta que me disgusté con Fernando Benítez, por su posición de apoyo a una critica vulgar, sobre lo que era el arte de contenido político-social".
Simultáneamente, Raquel Tibol entró a Diorama de la Cultura de Excélsior, colaboró durante 24 años y salió con el equipo de Julio Scherer. Participó en la revista Política, dirigida por Manuel Marcué Pardiñas, de 1962 a 1966. "Pero siempre he sido free lance". Ella misma se pregunta: ¿Y por qué decidí ya no hacer mi columna de arte dentro de la revista Proceso? Porque llegó un momento que dije bueno, ya estoy en una edad avanzada y tengo que concentrarme más en revisar mis notas, mis materiales, hacer libros y en eso he estado".
¿Qué le falta por hacer?
—Por ahí me andan rondando las Ideas estéticas de Alfonso Reyes (1889-1959). Nadie antes había trabajado la relación de Reyes con las artes plásticas. Fui la primera que trabajé ese tema, llegué a hacer mil 200 fichas de investigación.
¿Si me permite una última pregunta con sentido humano, en la vida qué la hecho más feliz y sufrir?
—No me gustan ese tipo de preguntas. En una larga vida, yo voy a cumplir el 14 de diciembre 84 años de edad, en una larga vida hay muchos momentos muy tristes y unos muy alegres.