Respuestas a las consultas de COMAC
En atención al compromiso establecido con quienes son parte del proyecto de esta diputación, atiendo al planteamiento hecho por el Presidente de COMAC el día de ayer e informo:
He confirmado con el vicecoordinador del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados que, -además de la solicitud pública que el C. Víctor Hugo Romo Guerra, diputado de la Asamblea Legislativa del DF (ALDF) le hiciera a Norberto Rivera para tener una reunión con ellos-, efectivamente hubo intentos por efectuar una declaración conjunta en torno a los matrimonios del mismo sexo entre los abogados católicos y el PRD. Me dice que la postura del PRD a nivel nacional es que el posible diálogo con la iglesia, bajo ninguna circunstancia implicaría la renuncia de principios o el desistimiento en la defensa de las causas por parte de ese partido a nivel nacional. Me comenta que el episcopado católico no se muestra particularmente interesado en realizar dicho acercamiento, por lo que no prevén que resulte sencilla la definición respecto de dicho encuentro.
Tocante a ello opino que, independientemente de compartir o no la estrategia que el PRD elija para relacionarse con la iglesia, esa es una definición interna que le corresponde a ese partido y son ellos los que deben resolver sobre el tema.
A nosotros como movimiento independiente nos toca generar nuestras propias estrategias en torno al impuso, defensa y posicionamiento de nuestra agenda. El esquema que Mario Arteaga plantea me parece correcto y por ello creo necesario y urgente apuntar lo siguiente:
Hace más de un año que activistas y organizaciones LGBTI del DF le dejaron claro formalmente al PRD y al Gobierno del DF (GDF) su convicción de que era el movimiento en su conjunto quien debía definir los tiempos y los contenidos de la reforma legislativa para el tema del matrimonio sin discriminación. Incluso presentamos una propuesta de consenso que además tenia toda la solidez jurídica necesaria para resistir la más dura de las revisiones legales. Lo hicimos como reacción a una iniciativa presentada por el mismo grupo político que ahora dio el paso que todos conocemos y que en ese entonces implicó el llamado “blindaje del matrimonio para heterosexuales” en tres estados de la república.
Personalmente, desde que en el pasado periodo de sesiones de la Asamblea Legislativa del DF (ALDF) en que el PRD-DF decidió, de nueva cuenta, hacer de este un tema de debate mediático y legislativo NO ha habido un día en que yo no declare fuerte y firme al respecto: he denunciado, presentado puntos de acuerdo, enviado oficios a diversos funcionarios, cabildeado, hecho conferencias de prensa, lanzado declaraciones, etc. He exigido formalmente a la PGR que se abstenga de intervenir en el tema y en este momento específico participo en los acercamientos con actores determinantes para evitar la acción de inconstitucionalidad y estoy dialogando con especialistas y líderes de opinión para que se manifiesten respecto de nuestros derechos. En ningún momento eludiré mi papel respecto del tema y estaré al frente de lo que tenga que estar y enfrentaré lo que se tenga que enfrentar.
Pero lo he hecho y lo haré sin perder de vista que fueron el GDF y el PRD-DF quienes eligieron a ésta como la coyuntura específica para legislar sobre el tema de matrimonios (incluso conociendo que esto afectaría federalmente a los posibles avances legislativos referentes a la reforma para fortalecer al Estado Laico y sin dar oportunidad a que el movimiento LGBTI en el país se preparara para enfrentar lo que evidentemente sucedería).
Lo hicieron sin que les importara tomar medidas preventivas respecto de la previsible, reactiva y ya anunciada embestida desde algunos Congresos Locales del país contra los derechos de las parejas LGBTTI.
Ni el riesgo latente de la acción de inconstitucionalidad y peor aun sin procurar la solidez jurídica de la reforma para dar la certeza de que los derechos de la población LGBTTI no sufrirán un revés en la Suprema Corte de Justicia.
Y de pilón lo hicieron con una infinidad de torpezas y absurdos discriminatorios, como fue el intento de crear un matrimonio de segunda con cláusulas discriminatorias para prohibir, sin justificación alguna, el derecho ya existente a la adopción, tema que (como ya lo señala el Presidente de COMAC) por su burdo manejo ha venido a reforzar el estigma contra las familias lésbicas, gay y transgénero con hijas(os) que existen (y van en aumento) en nuestro país y el resto del mundo.
Con lo que además abrieron paso a alimentar una práctica discriminatoria que legitimaría la exclusión y el insulto homo-lesbofóbico que la propia Constitución Política mexicana prohíbe. En medio de un debate que más bien se percibe improvisado, sin táctica ni estrategia y sin conducción, en el que se incluye el resucitar muertos para hacerlos cómplices de complots incomprensibles, etc.
Reitero que por esa determinación, la posibilidad de avanzar en una reforma para fortalecer al Estado Laico que incluyera libertades y derechos fundamentales se perdió y que hoy trabajamos (intentando que el debate mediático no devore al legislativo) en un acuerdo para una reforma mas modesta, aunque sin duda importante.
Por todo ello, a pesar de presiones, mentiras absurdas y… lo que venga contra la que suscribe, estoy convencida de que, además de la defensa absoluta de un tema por el que he luchado décadas, mi obligación está también en señalar la primera responsabilidad que el PRD tiene en hacerse cargo en forma integral de todas las aristas que se desarrollen en torno al tema y no puede “zafarse” impunemente de ninguna de ellas. Menos aun considerar que conflictos generados por militantes de su partido le resulten incómodos electoralmente y que por ello pudiera rehuir a hacerse cargo de ellos.
Así opino que, a las ONG´s y activistas independientes, antes que preocuparnos la situación que el PRD pueda enfrentar respecto de la coyuntura, y antes de plantearnos regresar a los tiempos del activismo reactivo y contestatario,lo que debemos priorizar -tanto en nuestras líneas discursivas como en nuestras acciones- es nuestro objetivo social y político respecto de las familias, nuestros derechos y la homo-lesbofobía. ¿Qué realmente queremos comunicar? ¿A nosotros nos toca el pleito con la iglesia o nos toca fijar las argumentaciones respecto de nuestros derechos y los de nuestros hijos? ¿Nuestro papel ahora es el de la confrontación o el de aportar elementos para el diálogo social respecto de los derechos humanos y la construcción de ciudadanía?
Lo que no puede dudarse es la necesidad de ocuparnos de la embestida que estarán enfrentando nuestros compañeros en los estados. Coincido en que la homo-lesbofobía en este país puede llegar a extremos terribles y son los compañeros en los estados más conservadores (a los que se les impuso este debate sin consulta) los más expuestos a la discriminación y los que menos herramientas tienen para enfrentarla y menos para contenerla. Y en que es la situación de estigma y discriminación que ya enfrentan nuestras familias en las que hay hijas(os), por el carnaval de argumentaciones baratas en que tienen sumido al tema. Responsabilidad de la que no tengo la menor duda, el PRD es el primer obligado en hacerse cargo.
Considero que mientras el PRD siga creyendo que es el movimiento independiente el que tiene que sumarse a “sus puntadas” respecto de nuestra agenda y que mientras ese Partido no se comprometa, formalmente y sin trucos, a relacionarse como aliado de la sociedad civil organizada, asumiendo compromisos claros respecto a las propuestas del Movimiento Independiente, empezando por respetar nuestros mecanismos internos e independientes de deliberación, y acordando en consecuencia y conjuntamente las estrategias a seguir; de ninguna manera creo que los cheques en blanco que algunos expiden a su favor deban ir acompañados de la firma de la mayoría de nuestro movimiento.
Pienso que efectivamente a nuestro activismo y a las ONG´s les toca asumir un papel relevante ante este debate impuesto, pero estamos obligados primero que nada a cuidar los frentes en los que podemos participar en forma articulada, sin que esto traiga como repercusión lo que sabemos es atractivo electoral para el sector más atrasado del PRD: que este tema se empiece a debatir en los congresos locales con la evidente repercusión en contra de los derechos de la población LGBTI de los estados. En el DF tenemos una obligación con el activismo nacionalque no podemos perder de vista. Por ello, lo primero es no caer en el artificio de ser parte de la dinámica de ataques y confrontación sin sentido en que se encuentra la politiquería montada en torno a la “NO reforma” del código civil del DF (porque justamente, como dice Mario, parte del asunto es que el código no se modificó en materia de adopción) y respecto del reconocimiento del matrimonio incluyente y sin discriminación.
El diseño de la estrategia que colectivamente articulemos sobre los derechos de las familias alternativas y el matrimonio sin discriminación no puede ser reactivo y menos producto de la compra de una factura que no nos corresponde. Elmovimiento independiente sabe preparar sus estrategias propositivas de acción, sabe sumar alianzas en torno a sus causas y tiene interlocutores de calidad que pueden hacer frente al peor de los fundamentalistas. Tenemos las herramientas para articular las líneas discursivas que acompañarán el debate de calidad que impulsaremos conjuntamente.
Lo que además, por cierto, no choca ni se contrapone con las medidas y acciones que cualquier expresión considere conveniente seguir. Hacer política de calidad y de largo plazo, pasa primero que nada por entender que no todos mediremos la coyuntura de la misma manera y menos aun nos posesionamos respecto de ella con los mismos intereses ni la misma visión.
Felicito que sea justamente la estrategia de mediano y largo plazo respecto de nuestras familias y derechos lo que les convoque y no el simplismo reactivo al golpe dado.
Por favor en eso cuenten conmigo.
Un abrazo a todes.
Enoé Uranga
No comments:
Post a Comment